MUEVETE

NO DEBEMOS PERMITIR QUE SE PONGA FIN A LA PRESTACIÓN DE UN SERVICIO PÚBLICO QUE FUNCIONA EFICIENTEMENTE, SUPRIMIENDO A LOS ABOGADOS DE OFICIO LIBRES E INDEPENDIENTES, VERDADEROS ARTIFICES DEL PRESTIGIO DEL QUE GOZA EL SERVICIO; Y MENOS PARA BENEFICIAR A QUIÉN; TAMPOCO DEBEMOS PERMITIR LA INSTRUMENTALIZACIÓN POLÍTICA DE LA JUSTICIA A TRAVÉS DEL USO O EMPLEO DE LOS OPERADORES JURÍDICOS.







miércoles, 19 de junio de 2013

AVISO A NAVEGANTES.-


Con todos mis respetos y sin ánimo de ofensa alguna hacia la APM, me gustaría que, desde un profundo examen de conciencia y de autotrascendimiento, me explicarán por qué consideran que una justicia interina, en clara referencia a los jueces sustitutos, “es "patológico para la independencia judicial"” y, por otro lado, que el Ministerio de Justicia y sus Asesores me explicasen por qué financian, con 600 euros brutos mensuales, sustituciones, entre jueces, que no aportan beneficios reales a la calidad y al servicio que deben prestar a la sociedad; amén de lo perjudicial de tal despilfarro, que vislumbra que ni se ahorran costes en seguridad social, obligada a tener que acudir al fondo de reserva mientras se detraen los aportes de los sustitutos, ni se agiliza el servicio, ni la calidad del mismo (peores resoluciones judiciales), ni se fomenta el empleo, ni el crecimiento económico, ni nada de nada, salvo la cuenta del banco de aquellos que asumen estas sustituciones improductivas y carentes de toda ética.


Que el Ministerio de Justicia y sus Asesores hayan alumbrado la idea de retribuir con 600 euros brutos mensuales, sustituciones, entre jueces, que no aportan beneficios reales a la calidad y al servicio que deben prestar a la sociedad....¡!
¿Para que servirá el actual Ministerio de Justicia....?

Por otro lado la independencia judicial, tal como parece insinuar la Asociación Profesional de la Magistratura, no se mide sólo por el hecho o no de la interinidad: hay jueces de carrera cuya independencia judicial puede ser cuestionada, y no son interinos, y, sin embargo, a las constantes presiones a la independencia judicial de los de carrera no las tachan de “patológicas”, cuando sí son realmente graves. Eso es lo grave que he observado y por eso quiero que se aclare a fin de evitar malos entendidos.

Porque la gravedad de esas manifestaciones, si no se puntualizan de algún modo, radica, además, en que dan a entender que los sustitutos son fácilmente presionados, utilizados o manipulados por los titulares que emiten los informes que los evalúan o por aquellos otros que resultan competentes y tienen potestad para proceder a efectuar su nombramiento efectivo o, por el contrario, mantenerlos en la lista sin llamamiento efectivo y entonces...

Que no importe la Justicia no es algo nuevo, en otro caso las cosas serían muy diferentes hace tiempo; no obstante que no les importe en un contexto de crisis es un síntoma claro de fuente de negocio futuro y corruptelas...y por la privada se puede competir con el actual sistema judicial otorgando derechos, a quien los pueda pagar o comprar: ¿eso es lo que buscan desde el Ministerio, aprovechándose de la ceguera y el espejismo, que los 600 euros le causan a algunos de los de carrera, que no ven que están firmando su desahucio a corto plazo a favor de un nuevo modelo que, más tarde o más temprano, los excluirá a ellos también?.

Está claro que desde el Ministerio lo que pretenden implantar es un nuevo sistema judicial...; los que no puedan pagar una justicia privada serán los que queden en manos del modelo actual de nefasta Administración de Justicia: tasas, arbitraje y mediación, indultos...van en esa línea, la creación de grandes multinacionales de la justicia de pago.

Problema de ese sistema: carencia de imparcialidad o el coste de la imparcialidad, el quién y cómo se va a regular la ética de este futuro negocio de la justicia o de concesión de derechos previo pago: ¿se van a subastar las resoluciones que se dicten a favor del mejor postor, por ejemplo?; ¿el Ministro del ramo va a reservarse potestades de control o a cobrar comisiones para inducir resoluciones o conceder favores, indultos, amnistías en casos de conflictos?.

Así que no es de extrañar que algunos parezcan interesados en el hecho de que un juez salga todos los días cuestionado, examinado y con todas sus intimidades al aire, en los medios de comunicación, por el simple hecho de habérsele ocurrido trabajar de juez que no, por ejemplo, de fontanero, camionero, etc, o que sea fácilmente controlable su actuación...si todos miramos para otro lado y se lo permitimos...¿acaso no obran bien?.

Y que esto no constituya un claro y denunciable mal "patológico para la independencia judicial"; que lo patológico para la independencia judicial sea la justicia interina....¡! habla por sí solo de quien pronuncia tal cosa y calla otras más graves que afectan a la independencia judicial y no las denuncia. Y que el Ministerio destine partidas presupuestarias, en tiempos de crisis, que no aportan beneficios reales a la calidad y al servicio en el que las derrocha..¡!.

Ejemplos recientes más apropiados que le sugeriría a la APM, ya que sacó el tema preocupada por eso de las patologías para la independencia judicial, al margen de lo de los brutos 600 euros, los tiene en este juez del enlace siguiente, al que no menciona, y del que solo falta que, con la única finalidad de cuestionar su trabajo e influir en la independencia judicial, nos digan de que color es su ropa interior y con quien se acuesta; juez que parece que no pasaba por allí a hacer una sustitución como interino y que, además, tiene pinta de ser de los de carrera y titular con plaza http://www.eldiario.es/politica/Fiscalia-persigue-juez-encarcelo-Blesa_0_143835912.html

Doy por hecho que la APM no tendrá ningún reparo en considerar que sí que hay conductas, como las que se describen en el siguiente enlace, que sí que son verdaderamente dignas de ser consideradas o constitutivas de ser englobadas en eso de lo "patológico para la independencia judicial" ¿o me equivoco?

Y espero, con ello, haberles convencido de que hablar de lo “patológico para la independencia judicial” como excusa para justificar la desaparición de la “justicia interina”, por culpa de los brutos 600 euros que despilfarra el Ministerio, en ciertos bolsillitos, para que hagan lo mismo que si no le metieran el sobre sueldo por tal exceso de “profesionalidad”, es un error patológico que perjudica seriamente la salud de la Justicia, la calidad y el servicio que debe prestar a la sociedad, así como la mínima dignidad e idoneidad que se espera de un profesional al servicio de la Justicia.

Y pensar que para que nos dejen sin Justicia y sin recursos para otras partidas, como por ejemplo las pensiones, estamos financiando y sosteniendo, entre todos, un Ministerio de Justicia, cuyo propio titular actual renegó en su día de la necesidad de la existencia de tal Ministerio pidiendo con contundencia su supresión...¡!. Pero ¿qué clase de magistrados, jueces, fiscales, secretarios judiciales, abogados, procuradores, funcionarios de la administración de justicia y ciudadanos somos?.

Si obráramos desde la sensatez, del ciudadano medio, y desde la profunda vocación de servicio a la Justicia y al Estado de Derecho, que se presume en todo operador jurídico, se impondría, en el actual contexto y frente a esos sobornos, con los que pretenden embaucarnos para comprar nuestros más elementales Derechos a precio de saldo con falsos argumentos, míseras perras y otras baratijas, el deber de unirnos todos a una como Fuenteovejuna.